1. Concentración total en una tarea.
2. Objetivos claros y con una recompensa definida. Retroalimentación inmediata.
3. Transformación de la percepción del tiempo.
4. La experiencia es intrínsecamente gratificante.
5. Sin demasiado esfuerzo ni facilidad. 6. Hay un equilibrio entre desafío y habilidades.
7. Las acciones y la conciencia se funden. (Sin pensamientos que distraen ni autoconsciencia).
8. Hay una sensación de control sobre la tarea.

Disminución de la actividad en la corteza prefrontal (2003), el área del cerebro responsable de las funciones cognitivas como la conciencia autorreflexiva, la memoria o la integración temporal. Es un área responsable de nuestro estado mental consciente y explícito. Sin embargo, en un estado de flow, la actividad en este área se inhibe temporalmentea en un proceso llamado hipofrontalidad transitoria. Esta inactivación temporal del área prefrontal puede desencadenar sentimientos de distorsión del tiempo, pérdida de autoconciencia y pérdida de crítica interna.

El primer paso para entrar en el flow es crear un contexto laboral donde existe un periodo donde eliminar todas las distracciones que puedan interrumpir la experiencia.

El equilibrio el desafío profesional y las habilidades percibidos son factores importantes en el flujo. En un desafío mayor que el nivel de habilidades, el integrante puede manifestar ansiedad y estrés. Por otro lado, cuando el nivel de habilidad excede el tamaño del desafío, el profesional se aburre y se distrae.

La experiencia del flujo en la vida cotidiana es un componente importante de la creatividad y el bienestar. De hecho, se puede describir como un aspecto clave de la eudaimonia, o autorrealización, en un individuo. Como es intrínsecamente gratificante, cuanto más lo practicas, más buscas replicar estas experiencias, lo que ayuda tener un mayor bienestar y compromiso.